En condiciones normales, lavar el exterior del coche es un procedimiento sencillo que resolvemos con agua, jabón y otros productos especializados en un autolavado o un túnel de lavado. Sin embargo, existen sustancias que complican la limpieza de la carrocería del coche, especialmente el barro, la resina, el alquitrán, los mosquitos y los excrementos de aves.
Cómo limpiar manchas difíciles de la carrocería del coche
Vamos a considerar, uno por uno, cinco elementos complicados para la limpieza exterior de tu automóvil.
Barro
En verano y a principios de la primavera, las tormentas de barro son habituales. Si no tenemos cuidado, podemos rayar el coche al quitar esa pátina de barrizal.
Lo importante es que humedezcas bien la chapa antes de empezar. Utiliza una bayeta de microfibra, con agua o con un poco de jabón diluido, si bien debes cambiar el agua del cubo con frecuencia, para evitar la tierra acumulada en el fondo. Aplica cera o repelente de lluvia y seca tu coche, para finalizar, con una bayeta diferente.
Resina
Los árboles bajo los que aparcamos pueden hacernos este regalo indeseado. El proceso de eliminación es similar al anterior: empieza humedeciendo todo el coche con tu limpiador habitual y hazlo todavía más en la zona afectada.
A continuación, pon un par de gotas de producto en la bayeta, espera dos minutos y pásala con cuidado por la mancha. Al terminar, lava completamente tu coche como siempre, con agua jabonosa.
Mosquitos
Estos insectos kamikazes que impactan contra nuestro parabrisas y nuestra carrocería dejan restos no siempre fáciles de eliminar. Lo mejor es que utilices un pulverizador de agua y un producto específico. Tras humedecer abundantemente la zona a limpiar con agua directa, pulveriza la mezcla y déjala actuar unos minutos. Pero ¡no demasiados! Los productos químicos pueden terminar dañando tu chapa.
Termina el proceso con un cubo con agua y champú para coches: extiéndelo con un guante de piel de oveja y déjalo actuar antes de aclararlo con agua a alta presión. ¡Asegúrate de no dejar restos de espuma!
Excrementos de aves
¡Qué rabia dan estos «presentes» sobre la cuidada silueta de nuestro vehículo! Las palomas, las golondrinas y los gorriones son los más activos en este reparto indiscriminado de suciedad. Más allá de su antiestético y desagradable efecto, estas heces contienen ácidos que pueden dañar la carrocería de tu coche si no las quitas pronto. Si es posible, ¡actúa cuanto antes!
En el caso de que haya pasado menos de media hora desde el incidente, moja la zona y mantén durante diez minutos un paño húmedo sobre la mancha. Pasado ese lapso, lo normal es que desaparezca al retirar el textil.
Si ha transcurrido más tiempo, humedece la mancha y su entorno. Después, empapa una esponja impregnada con champú para vehículos y frota con suavidad. En el peor de los casos, utiliza un producto específico para completar la tarea.
Con estos procedimientos para la limpieza de la carrocería del coche puedes mantener su estética impecable en todo momento. Y si pese a todo necesitas un servicio profesional de chapa y pintura, no lo dudes: te esperamos en Talleres Garygar. ¡Cuenta con nosotros!